La seguridad privada es un aspecto que cada vez más tienen en cuenta las empresas para preservar sus negocios y controlar todo lo que sucede en el edificio. Pero, a la hora de contratar a una empresa de seguridad solvente y eficaz, hay que barajar distintos factores, ya que hay muchas compañías en el mercado y no es fácil elegir cuál es la que mejor se adecúa a las necesidades de cada negocio.

En primer lugar, la empresa candidata debe llevar una larga trayectoria ofreciendo sus servicios de seguridad privada, con profesionales cualificados y con una formación que cumpla la normativa legal vigente. Además, deberá tener una experiencia contrastada para desempeñar los servicios que el negocio requiere y cumplir con un mínimo de garantías para lograr los objetivos marcados.

Cada empresa tiene características diferentes y necesidades de seguridad que deben ser definidas por los expertos en seguridad privada. No todos saben adaptarse a esas necesidades o disponen de los medios para hacerlo, de ahí que la elección de una compañía de seguridad que cumpla con las expectativas supone un trabajo de búsqueda que no siempre es fácil. En cualquier caso, antes de contratar seguridad privada hay que tener muy claro los beneficios que podemos obtener para nuestro negocio.

Principales beneficios que aporta una empresa de seguridad

1- Vigilancia adaptada

Dependiendo de la actividad de cada empresa, ésta puede necesitar una vigilancia de un determinado número de horas al día o 24 horas. Una buena empresa de seguridad se adaptará a las necesidades de la empresa y le ofrecerá un servicio personalizado de vigilancia, con un plan diseñado y elaborado exclusivamente para ella, por ejemplo, con un control de accesos de personas y vehículos al edificio que sea eficiente, vigilancia nocturna diaria, solo los fines de semana, o lo que sea necesario.

2- Calidad del servicio

Los vigilantes de la empresa de seguridad deben tener una cualificación y preparación acorde al servicio que están prestando, de tal forma que deben estar preparados, no solo para la vigilancia, sino también para saber actuar ante todo tipo de contratiempos como pueden ser inundaciones, incendios, robos, actos de vandalismo o terrorismo, etc. Los vigilantes deben hacer dos cursos de formación al año para mantener y aumentar sus conocimientos y habilidades. Además, deben conocer las posibles modificaciones de la normativa legal vigente a la hora de desarrollar los protocolos de actuación necesarios en cada momento. Junto a la cualificación y experiencia de los vigilantes, la empresa de seguridad también debe contar con material de última generación y la máxima innovación tecnológica, para llevar a cabo el mejor trabajo posible.

3- La empresa de seguridad se encarga de todo

Es una de las ventajas más apreciadas por las empresas que contratan seguridad privada. Es decir, que no tienen que gestionar absolutamente nada relacionado con la seguridad, ya que es la empresa contratada la que se encarga de todo, por ejemplo, en caso de que haya cualquier eventualidad, pueden enviar más personal, se ocupan de la sustitución de los trabajadores si hay ausencias, rotaciones, turnos, uniformes, material, etc. La externalización de este servicio permite que sea la empresa especializada la encargada de garantizar la seguridad y el cumplimiento de los objetivos fijados con el cliente con sus propios medios.

Por tanto, delegar la seguridad de un edificio de oficinas, una comunidad de vecinos, o una propiedad particular en una empresa de seguridad, supone una decisión muy importante que hay que meditar con calma. En Tres Punto Uno somos expertos en vigilancia y seguridad privada, disponemos de personal cualificado y la última tecnología para que los responsables del negocio se ocupen solo de gestionar su empresa. Contacta con nosotros y descubre todo lo que podemos hacer por ti.