Los sistemas de seguridad inalámbricos
Los sistemas de seguridad inalámbricos tienen cada vez más demanda. Con tantas opciones disponibles, seleccionar el sistema adecuado puede ser abrumador. Muchos de los sistemas de seguridad instalados dependen aún de sistemas cableados conectados a un panel de control central. Sin embargo cada vez son más los sistemas inalámbricos, especialmente en domicilios y PYMEs
Los sistemas de seguridad inalámbricos están compuestos por varios dispositivos como sensores de puertas y ventanas, detectores de humo y cámaras. Estos componentes se comunican utilizando frecuencias de radio (RF) que varían de 315 a 900 MHz. Se conectan a un panel de seguridad todo en uno que utiliza señales WiFi o móviles para transmitir las alertas.
Aunque sus componentes suelen funcionar con baterías, el panel de seguridad necesita estar enchufado a la red. Esta configuración es diferente a los sistemas cableados, que están integrados en la red eléctrica del inmueble.
Características Clave de los Sistemas de Seguridad Inalámbricos
- Detección de movimiento: detectan movimiento dentro y alrededor del inmueble
- Protección perimetral: suelen monitorizar puertas y ventanas para detectar intrusiones
- Cuentan con botones del pánico: proporcionan una alerta inmediata en emergencias
- Detección de humo y CO: identifican humo y monóxido de carbono
- Detección de temperaturas extremas: en ciertos entornos algunos sistemas avanzados alertan sobre condiciones de congelamiento o de calor extremo
- Detección de fugas de agua: nuevamente, algunos sistemas específicos instalados monitorizan fugas y posibles inundaciones
Su mecánica es sencilla, cuando se activa una alarma, el sensor envía una señal al panel de control, que hace sonar la alarma y la notifica al usuario y al centro de monitorización. El centro verifica la alerta y se pone en contacto con el usuario y con los servicios de emergencia si es necesario.
Los sistemas inalámbricos son fiables, al igual que sus contrapartes cableadas. Sin embargo, al funcionar sus componentes con baterías, estas requieren reemplazo regular, generalmente cada pocos años.
Los sistemas inalámbricos no son completamente inmunes a los cortes de energía. Mientras que los componentes usan baterías, el panel de control depende de la energía de la red, aunque suele incluir una batería de respaldo que puede durar de 8 a 24 horas. Durante un corte, si el WiFi está caído, un transmisor GPRS asegura la comunicación con el centro de monitoreo.
Beneficios de los Sistemas de Seguridad Inalámbricos:
- Instalación más flexible: no se necesitan fuentes de energía cableadas, permitiendo una colocación más versátil
- No invasivo: ideal para inquilinos; los componentes son fáciles de instalar y quitar sin alterar demasiado el inmueble
- Identificación de puntos: incluso cuando está desactivado, el sistema puede alertar sobre puertas o ventanas abiertas, siendo esto útil por ejemplo para personas con discapacidad visual
- Integración: el panel de control puede gestionar otros dispositivos inteligentes como termostatos y cerraduras de puertas a través de una sola aplicación, ofreciendo un control sin interrupciones
Los sistemas inalámbricos ofrecen numerosas ventajas pero pueden no ser adecuados para todos. Consultar a un experto en seguridad puede ayudarte a elegir el mejor sistema, ya sea inalámbrico, cableado o híbrido, basado en tus necesidades y estilo de vida específicos. En TresPuntoUno estamos para ayudarte.
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